- Escrito por Edwin Umaña Peña
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"El Acontecimiento" de Annie Ernaux: aborto e hipocresía en la sociedad patriarcal
He acabado de poner en palabras lo que se me revela como una experiencia humana total de la vida y de la muerte, del tiempo, de la moral y de lo prohibido, de la ley, una experiencia vivida desde el principio al final a través del cuerpoAnnie Ernaux - El Acontecimiento
La francesa Annie Ernaux, ganadora de Premio Nobel de Literatura en el año 2022, ha desarrollado una obra enfocada en la autoficción, es decir, en narrar su propia vida y reflexionar sobre ella. En sus obras la escritora relata hechos que la han marcado, sin pudor, describe y reflexiona acerca de los personajes que la han rodeado y han sido importantes para su aprendizaje como ser humano, nos muestra los espacios físicos que ha recorrido y cómo han cambiado, pero también analiza las emociones, pensamientos y sentimientos propios que a lo largo del tiempo se transformaron, perdieron validez o se hicieron definitivos. Hace una mirada muy lúcida a la sociedad francesa en la que le tocó vivir, la cual analiza de forma drástica, sin compasión ni autocompasión, para dejar en evidencia sus falsedades y contradicciones, que muchas veces reconoce en sí misma.
Hace, en últimas, una mirada feminista al devenir de su propia vida, a través de un drástico análisis en el cual quedan expuestas las falencias de los universos femeninos y masculinos que ha recorrido. Una de sus novelas más destacadas es "El acontecimiento", en la que cuenta su experiencia del aborto en los años sesenta, cuando era una joven estudiante universitaria.
El sexo como experiencia desigual para mujeres y hombres
En los años sesenta en Francia el aborto era ilegal, tanto la mujer que abortaba como quien lo ejecutaba podían ir a la cárcel y sufrir el señalamiento social. Este es el eje del conflicto en la novela de autoficción "El acontecimiento". La narradora es una joven que estudia letras en Ruán y ha quedado embarazada, fruto de una relación con P., otro joven estudiante, acérrimo militante de la izquierda universitaria, quien al enterarse del estado de su compañera se desinteresa y le pide que ella resuelva ese problema pues al parecer es algo muy burgués preocuparse por el embarazo de su novia.
La autora nos cuenta cómo, por una relación sexual cuyo único objetivo había sido el gozo personal y mutuo, su vida da un vuelco que lo cambia todo. Pero mientras su realidad se agita de una forma drástica, todo a su alrededor parece seguir su curso, como si nada. Ella se empeña en olvidar esto, sumergiéndose en las lecturas que la atraen o en el cine, esperando la llegada de la regla, pero su cuerpo se encarga de recordarle que las cosas han cambiado. Algo crece dentro de ella y altera su cotidianidad, sus emociones, su salud, su forma de ver y mirar el mundo, mientras tanto su compañero sigue su vida, desentendiéndose de lo hecho, más interesado en analizar la desigualdades de la sociedad francesa y rechazar y criticar el modo de vida burgués.
El mundo en el que creía vivir la joven se desmorona a medida que su embarazo avanza, al tiempo que se da cuenta de la dimensión de su soledad y de la hipocresía de esa sociedad patriarcal que abarca todos los espectros políticos. Estamos en el año 1963 y el amor libre ya es un hecho para los jóvenes, el sexo se ha liberado del tabú y la moral, pero sus consecuencias siguen siendo objeto de control del patriarcado. De forma grotesca ella entiende que una cosa es el disfrute mutuo de la sexualidad y otra las posibles consecuencias de esto, ya que mientras los hombres siguen su camino son las mujeres las que deben cargar con secuelas del placer, de un desliz, del mal cálculo de una fecha o de una eyaculación no controlada.
La cobarde y morbosa presencia masculina
La mayor parte del relato se enfoca en la búsqueda de un médico que le practique un aborto. La joven nos cuenta su deambular por Ruán, la angustia creciente al sentir que su vientre crece y algo se transforma en su interior mientras que no sabe en quién confiar, a quién poder contar su secreto. Ella va a ser la primera profesional de su familia y recurrir a sus padres desencadenaría la hecatombe de la decepción familiar. En ese recorrido recurre al algunos amigos, L.B., Jean T. y J.B., quienes parecen fascinados por la morbosidad al escuchar la petición de la joven, incluso uno de ellos intenta aprovecharse de su momento de fragilidad y busca tener sexo con ella. Las parejas de estos amigos no le dan una mejor opción y es la soledad y la angustia las que la acompañan en este recorrido.
Mientras busca evadir su presente en la lectura y sobre todo en el cine, recurre a un médico, el doctor N., que alguien le ha recomendado, pero este se niega a practicar el aborto, los riesgos son enormes para él. En el trasegar de su necesidad comienza a reconocer la torva dependencia de los hombres a los que necesita recurrir, y descifra la morbosa mirada masculina hacia una joven que necesita abortar, la cual parece ser ahora una presa fácil a quien acceder sexualmente o con quien alimentar perversos pensamientos lúbricos. Son, sin embargo, hombres cobardes, comenzando por el padre del ser que lleva dentro, el estudiante P. y los amigos que lo rodean. Sin embargo la autora, quien escribe este relato casi treinta años después de ocurrido, es consciente de que al mismo tiempo lo masculino ejerce una gran atracción en ella y una necesidad ligada a su gusto por el sexo, a sus profundos deseos eróticos, también es consciente que siente una especie de fascinación al analizar esos seres crueles que dominan el mundo. Algo que reconoce en ella pero de lo cual no se siente orgullosa.
Las mujeres resuelven los problemas de las mujeres
La pareja de uno de sus amigos le recomienda a la joven ir donde una mujer que practica abortos en París. Así conoce a la señora P.-R., la abortera que habrá de practicarle un aborto casero por medio de una sonda, desinfectada en una olla de agua hirviendo, la cual le introducirá y dejará algunos días hasta que el feto se desprenda. Pero las cosas no saldrán según lo pensado y el aborto llegará en la residencia universitaria, asistido por su amiga O., mientras siente su cuerpo desfallecer. La joven terminará en el hospital, casi al borde de la muerte, donde es asistida por enfermeros y médicos que le van a reprochar su decisión.
La figura de la abortera, la señora P.-R., una enfermera anónima que practicaba abortos clandestinos, se tornará un símbolo para la joven, el eslabón final de una enorme cadena de mujeres señaladas por la sociedad, como la prostituta, la bruja, la madame del burdel, o la alcahueta, figuras malditas para la sociedad, señaladas por hombres y mujeres de bien, pero personajes que resuelven los asuntos oscuros de los universos femeninos y masculinos. Estas mujeres malditas, figuras clandestinas, que serán las únicas a las que podrán recurrir las jóvenes que desean abortar. Esa es la mujer a la que habrá de buscar la escritora, años después, mientras escribe el relato.
La escritura a posteriori
Uno de los aspectos más atractivos de "El acontecimiento" es la estrategia narrativa empleada ya que la obra comienza años después, cuando la autora va a un hospital a hacerse una prueba de VIH ya que ha tenido una relación sexual sin protección. La visita al hospital desencadena el recuerdo y ella es consciente de que ha llegado el momento de contar ese hecho que ha marcado su vida.La escritura se hace a posteriori y esto ejerce un efecto deslumbrante en el relato ya que a medida que nos cuenta las cosas Annie Ernaux inserta una serie de lúcidas reflexiones, fruto de años de recordar y repensar lo sucedido, donde expone con ironía, cinismo, dolor, pero sin pudor ni vergüenza, una mirada acertada, corrosiva y certera. Esta mirada abarca lo sucedido pero también el mismo proceso de la escritura, de recordar y mirar las oscuridades, la conciencia de reconocer lo sórdido y doloroso de la vida propia, el dolor de la fragilidad, el peso de la responsabilidad personal en lo sucedido y el saber que muchas veces ocurren cosas que lastiman y hacen daño, pero cuyo aprendizaje cuesta reconocer y que muchas veces llega después de haber errado nuevamente.
"El acontecimento" es una obra suprema que conmueve profundamente, una novela que merece leerse muchas veces. "El acontecimiento" fue llevada al cine en el año 2021, por el director Audrey Diwan, y fue la película ganadora del León de Oro en el Festival de Venecia de ese año.
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Edwin Umaña Peña
Escritor, guionista y docente universitario.
Autor del libro de cuentos "Amor Sexo Decepción" (2021) y de la novela "La conspiración de los farsantes" (2017).